El Celta B sumó su tercera victoria consecutiva en Barreiro a costa del Racing de Ferrol
Dicen que como en casa no se está en ningún sitio. El Celta B ha hecho del refrán su lema en el último mes, en el que ha canjeado sus tres partidos en Barreiro por victorias. La última, ayer ante un Racing de Ferrol que dejó notar su apurada situación clasificatoria con un fútbol deslabazado y precipitado. Los de Rubén Albés solo necesitaron de una buena primera parte con gol de Juan Hernández y una segunda amparada en la solidez de Sotres para asegurar unos tres puntos que les dejan a seis del cuarto lugar, que marca el Rápido.
El equipo vigués dejó claras sus intenciones en apenas dos minutos, los que tardó Drazic en obligar a Mackay a intervenir. El portero coruñés envió a córner de manera acrobática un testarazo del serbio a centro de Kevin. Fue el pistoletazo de salida de un absoluto dominio celeste de la mano de Rai y Álex Serrano.
El gol local era una fruta en el árbol que solo necesitaba tiempo para caer de madura. Y poco tiempo. El conjunto vigués tomó ventaja al filo del cuarto de hora, cuando de nuevo Kevin sirvió un centro magnífico desde la derecha para Juan Hernández, que apareció en el segundo palo para remachar a la red. El tanto disparó los nervios en las filas departamentales y llenó de placidez el juego de los futbolistas locales, que disfrutaban sobre el césped. Pero en el fútbol las dinámicas son solo pistas de lo que puede pasar. Todo puede cambiar en un instante y el Racing tuvo opciones de empatar con el balón parado, siempre bien ejecutado por Pablo Rey. Jacobo Trigo, Joselu y Maceira pudieron marcar, pero entre Sotres y la defensa lo evitaron.
En cuanto a juego corrido, no había color. O sí lo había: color celeste. La precisión quirúrgica de Rai en el primer pase permitía que la pelota llegase en situaciones muy ventajosas para Juan Hernández y Drazic, ayudados por la insistencia de Eckert. El alemán tuvo dos oportunidades para marcar, pero chutó fuera en la primera y se topó con Mackay en la segunda.
El cuadro ferrolano salió mejor organizado al segundo tiempo con la entrada de Armental y una posición más retrasada de Pablo Rey El choque estaba más equilibrado. Al filial del Celta le costaba más combinar y generar superioridades, aunque encontró un par de veces la profundidad por el sector izquierdo de Juan Hernández. En una de estas acciones, el lorquino se fue hacia dentro y reclamó penalti tras chocar con un defensa.
Pero poco a poco y a base de empuje, el Racing fue volcando el partido hacia su lado. El Celta B pegó un bajón en su presión y los hombres de Ricardo se lanzaron a por el empate. Armental, dentro del área, remató al lateral de la red tras una buena acción y solo un minuto después, Joselu encontró una buena respuesta de Sotres a su zurdazo desde la frontal. El portero cántabro, muy sólido durante todo el partido, volvió a aparecer para quedarse un disparo de Juan Mera. El filial pudo sentenciar en un error en la cesión de Víctor Vázquez hacia Mackay que, no obstante, aguantó al máximo ante Eckert para imponerse en el mano a mano.
Los minutos finales fueron un compendio de juego directo y nervios. El cuadro ferrolano lo intentó con Nano descolgado como delantero centro pero el equipo vigués aguantó sin demasiados apuros y dejó la victoria en Barreiro.
Celta B:
Sotres; Kevin, Robert Costa, Ros, Pampín (Riki, min. 38); Rai, Álex Serrano (Dani Molina, min. 73); Juan Hernández, Drazic (Aarón Rey, min. 65), Agus Medina; y Eckert.
Racing de Ferrol:
Mackay; Seoane, Víctor Vázquez, Nano, Aitor Pascual (Juan Mera, min. 71); Jacobo Trigo, Joseba Beitia (Armental, min. 46); Álvaro Rey (Fran Sota, min. 56), Pablo Rey, Maceira; y Joselu.
Goles:
1-0, min. 14: Juan Hernández.
Árbitro:
González Hernández (Comité castellano leonés). Amonestó con tarjeta amarilla al jugador local Robert Costa y a los visitantes Joseba Beitia, Nano, Jacobo Trigo y Maceira.
Incidencias:
Partido disputado en Barreiro ante 250 espectadores.
