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Gran partido en mal momento

Giuseppe Rossi, deseoso de tener minutos, será hoy la punta de lanza del Celta en Anoeta.
photo_camera Giuseppe Rossi, deseoso de tener minutos, será hoy la punta de lanza del Celta en Anoeta.

El Celta reservará a la mayoría de sus titulares ante la Real, rival directo en la lucha por las plazas europeas (18:30, Bein)

Celta y Real Sociedad protagonizan hoy en Anoeta un choque muy atractivo sobre el papel con el que ambos cerrarán la primera vuelta liguera en la pelea compartida por las plazas europeas. Pero lo harán desde un punto de vista distinto. Los vigueses –con un buen resultado en la ida de la eliminatoria copera ante el Real Madrid, con la Liga Europa aún en lontananza, con más partidos a sus espaldas y con cinco puntos menos en la clasificación– presentarán en San Sebastián su plan B en cuanto a nombres; los donostiarras –con una derrota en la ida copera con el Barça, sin una tercera competición que lo haya desgastado o lo vaya a desgastar en el futuro, con cinco puntos más en Liga y en puesto de Liga Europa y con los de Liga de Campeones a tiro– apostarán por su versión titular, mediatizada con alguna molestia física.
Siendo el partido que es por lo clasificatorio, para el conjunto vigués sería vital para intentar acercarse a las seis primeras plazas y dejar a un rival directo en esa lucha a tiro de tres puntos. Pero cae en el medio de una eliminatoria copera con el Real Madrid con visos de resultar histórica tras el 1-2 de la ida y Eduardo Berizzo tiene clara su apuesta: el encuentro del miércoles tiene más importancia hoy por hoy que el de esta tarde.
Por eso, y porque el calendario ha apretado y, si hay suerte, apretará a sus hombres más utilizados,  el argentino empezó tomando decisiones ya desde Vigo, dejando en casa a tres titulares como Marcelo Díaz, Daniel Wass y Jonny Castro. Declaración de intenciones que, según reconoció públicamente ayer, tendrá continuidad hoy en el once inicial que presente en Anoeta.
Las novedades empiezan ya desde la portería, aunque en este caso por la lesión de Rubén Blanco, lo que propicia el regreso a la titularidad en Liga de Sergio Álvarez. El desafortunado meta mosense es la única baja obligada junto a la ya conocida de Claudio Beauvue y a la ya permanente de Fabián Orellana, apartado del equipo y a la espera de salir traspasado.
En defensa, al técnico celeste no le queda más remedio que utilizar al menos uno de sus cuatro titulares y todo apunta a que el elegido será Roncaglia. Junto a él, dos suplentes pero con minutos de manera habitual, aunque no juntos, como Sergi Gómez y Andreu Fontás. Y en el lateral izquierdo reaparecerá Carles Planas, más de dos meses después tras superar la lesión muscular de la que recibió el alta la pasada semana.
En el centro del campo, Pablo Hernández estará, dado que una sanción le impedirá jugar el miércoles en Copa. Pero no basta con que el internacional chileno repita y es probable que también tenga que hacerlo Nemanja Radoja, salvo que Berizzo se decida por el canterano Pape. El tercero será otra rutilante novedad, el hasta ahora único fichaje invernal Jozabed Sánchez, que presumiblemente debutará con la camiseta celeste como titular. Y arriba, con Iago Aspas, John Guidetti y Théo Bongonda reservados para el Madrid, la oportunidad será para Pione Sisto, Giuseppe Rossi y Josep Señé.

Una Real sin Illarramendi
Enfrente, una Real algo cansada por el duelo con el Barcelona y con las consabidas bajas de Carlos Martínez y Agirretxe, a las que esta semana se una la muy sensible de Illarramendi, sancionado. Esta última es una ausencia sensible, que suplirá Granero pero que impedirá a Eusebio Sacristán alinear en su totalidad a su once titular en los últimos tiempos, aunque la mayoría estarán. Falta por saber si los recientes problemas físicos de Carlos Vela aconsejarán su suplencia.

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