Ese futbolista diferencial

Stanislav Lobotka controla un balón durante el partido de anoche en Balaídos.
photo_camera Stanislav Lobotka controla un balón durante el partido de anoche en Balaídos.

8Lobotka. Se le echaba de menos. Mucho. El internacional eslovaco recordó ayer sobre el césped de Balaídos al jugador que maravilló la primera mitad de la pasada temporada y que estaba un tanto perdido en la actual, debido al cambio de ubicación que le supone la propuesta de Antonio Mohamed.
No fue el caso ayer. Desde prácticamente el arranque del partido, a Lobotka se le vio fino eligiendo el lugar del campo en el que habitar, preciso y rápico en la conexión con la siguiente línea, intenso en la recuperación y, sobre todo, valiente para asumir que el balón debe pasar por él. El centrocampista recuperó la prestancia de otrora y, junto a Fran Beltrán, fue básico en superar la presión alta que quiso realizar el Alavés de entrada.
Mantuvo ese reinado el eslovaco hasta que a Mohamed se le cruzaron los cables con el gol del Alavés y sacó del campo a Beltrán. Sin él y con Brais de compañero, a Lobotka le tocaba estar en más sitios justo cuando empezaba a notar el cansancio acumulado en una semana en la que disputó dos encuentros con su selección. Aun así, se animó a dirigir el juego del equipo desde el centro metido en la mitad de campo vitoriana.
A toda la conexión que logró el eslovaco le faltó finalización. Bien él; mal el resultado.n 

Te puede interesar