Antonio Mohamed asume las dificultades del partido y asegura tener "mucha energía"
Con un rictus más serio del habitual pero sin dramatizar. Así compareció ayer Antonio Mohamed en la rueda de prensa previa al partido con el Alavés. "Éste es el día", no se cansó de repetir, mientras afirmaba estar pleno de ánimo para cambiar el rumbo de las cosas pese a las dificultades.
La primera, la baja de Maxi Gómez, que asegura no hará variar su apuesta, pero sí la forma de hacerla. "Queremos repetir lo de las primeras jornadas. La idea no va a cambiar. Puede ser que el equipo juegue mucho más corto al no tener referente pero la idea de ir a ganar es la misma", expuso.
Tras una semana ausente y cuatro días de trabajo, Mohamed aseguró estar "con mucha energía. A veces los resultados no se dan pero no deja de ser una oportunidad para levantarse. Tenemos que jugar bien, ganar, recuperar la confianza y devolver a la afición todo lo que no le pudimos dar en los partidos anteriores. Mañana es el día".
No oculta el técnico celeste las especiales circunstancias de la preparación de este partido. "Nos faltan muchos jugadores. Los que están han entrenado muy bien. Saben que al no estar Maxi se abre una posibilidad y eso genera motivación en los que no venían jugando", reseña.
Mohamed tiene claro que la solución a todos los males es una victoria. "Extrañamos ganar, el grupo se debe una victoria. Mañana es el día. Sería muy bueno ganar para resituarnos en la tabla y retomar los objetivos de inicio de temporada", expone. Y asume tener que hacerlo un viernes en semana con compromisos de selecciones: "Sería más lógico jugar otro día, pero hay que adaptarse a lo que tocó. Hay que ver cómo están los que llegan y preparar el partido". En ese sentido, considera que Pione y Lobotka "tienen una recuperación rápida. No creo que el hecho de haber jugado más o menos con sus selecciones influya en alguna decisión sobre el once".
Todo ante un Alavés que llega en "un gran momento. Ha tenido partidos malos y buenos pero ha sido regular. Es un gran parámetro. Qué mejor que enfrentarse a un rival en racha". Y asumiendo que el celtismo está pendiente y que quiere otro fútbol: "Antes de ganar, jugar bien. Ese grado de desconfianza que generamos hay que borrarlo. Ojalá sea un buen juego y que el equipo gane".
Sin Araujo ni Maxi y con Okay con alguna molestia, Mohamed reconoce que "perdemos muchos centímetros. En algún momento podía suceder y pasa con un rival que ha ganado partidos a balón parado", se lamentó.
Por último, volvió a referirse a la situación de los descartes habituales, en este caso concretando en Radoja. "Todos están con posibilidad. En esa posición tengo a Lobotka, Fran y Okay. Está un poco rezagado pero considerado como cualquiera", reiteró.n
