celta

El exilio no afecta al Shakhtar

Los jugadores del Shakhtar, durante un entrenamiento en el estadio Bannikov de Kiev.
photo_camera Los jugadores del Shakhtar, durante un entrenamiento en el estadio Bannikov de Kiev.

El rival del Celta lleva cerca de un año sin perder como local, a pesar de que no juega en Donetsk desde 2014

A mediados de 2014, el Shakhtar se vio obligado a abandonar su hogar en Donetsk debido a la guerra en Ucrania. Sin embargo, el exilio no ha afectado a los resultados del rival europeo del Celta, que lleva prácticamente un año sin perder un encuentro en condición de local. El equipo de Eduardo Berizzo tratará de romper el jueves la racha de los ucranianos, que a partir de ahora jugarán en el OSK Metalist de Járkov después de año y medio haciéndolo de manera regular en Lviv.
Donetsk es una de las ciudades que más afectadas se han visto por la guerra en Ucrania. En julio de 2014, varios jugadores del Shakhtar se negaron a regresar al país tras disputar un amistoso en Francia. El propietario del club, Rinat Ajmetov, ya anunció entonces su voluntad de mudarse a Járkov. "Deseamos jugar en Donetsk, pero desafortunadamente en este momento no podemos. Jugaremos donde se nos permita. Nos gustaría hacerlo en Jarkov", afirmó. Sin embargo, días después el Shakhtar anunció que trasladaba su sede a Kiev –donde continúa hoy en día– y que disputaría sus encuentros como local en Lviv, localidad situada en el oeste de Ucrania, a 1.260 kilómetros de Donetsk.
Alejado de sus aficionados, en la otra punta del país, el Shakhtar siguió sumando buenos resultados. Sin ir más lejos, la temporada pasada alcanzó las semifinales de la Copa de la UEFA. El Sevilla los apartó de la final y fue precisamente en el Arena de Lviv donde el excéltico Krohn-Dehli sufrió la grave lesión de rodilla que estremeció al mundo del fútbol. 
El Shakhtar no siempre ha podido disputar sus encuentros caseros en dicho estadio. De hecho, su última derrota como local se produjo en realidad en el campo de su rival, el Slavutych Arena del Zorya Luhansk (2-3), en la última jornada de la liga ucraniana de la temporada 2015/2016. Fue el 15 de mayo de 2016. La última derrota encajada como teórico local y en un campo neutral fue el 27 de marzo de 2016 en el pequeño estadio Obolon, un campo con capacidad para poco más de 5.000 espectadores ubicado en Kiev. El Shakhtar perdió allí un partido de Copa ante el Vorskla Poltava (1-2), aunque el 0-4 de la ida le permitió avanzar igualmente a semifinales.
Para encontrar la última derrota del rival del Celta en el Arena Lviv hay que remontarse al 25 de noviembre de 2015, día en que el Shakhtar perdió contra el Real Madrid (3-4) un encuentro de Liga de Campeones.
Ahora, tras recibir el permiso de la UEFA, el Shakhtar jugará sus partidos como local en el OSK Metalist de Járkov, localidad situada a menos de 300 kilómetros de Donetsk. Mucho más cerca de su hogar, el conjunto que dirige Paulo Fonseca, espera contar con un mayor apoyo de sus aficionados para dar continuidad a su magnífica racha esta temporada, en la que sólo ha perdido un partido de treinta y uno disputados, el pasado mes de agosto en casa del Young Boys suizo, derrota que lo dejó fuera de la Liga de Campeones.
El objetivo del Celta es romper la dinámica del Shakhtar, al que necesita vencer para clasificarse para los octavos de final de la Liga Europa tras la derrota encajada la semana pasada en Balaídos. Andreu Fontás se mostró ayer confiado en las posibilidades del conjunto celeste. "Sabemos que este equipo es capaz de todo. Nos enfrentamos a un gran rival, pero estamos convencidos de que podemos dar la campanada allí, de que podemos ganar fuera de casa en un campo que sabemos que va a ser muy difícil. Hay optimismo, estamos en una buena dinámica de juego y de trabajo y vamos allí a por todas", afirmó ayer el central catalán, que considera que el Shakhtar no fue mejor que el Celta en el encuentro de ida: "La verdad es que no fue superior para nada, a parte de la efectividad, que fueron muy efectivos. Para mí fue una pena no conseguir ningún gol o llevarnos mejor resultado. Pero la sensación del partido nos deja el optimismo que tenemos ahora. La sensación de que es un equipo muy bueno, pero no fue superior a nosotros en casi ningún momento del partido. Si estamos bien, a nuestro mejor nivel, y en momentos puntuales tenemos el acierto necesario, podemos hacer algo grande allí y pasar".
El Shakhtar ganó en Balaídos gracias a una contra rematada por  Gustavo Blanco. Fontás advirtió ayer del peligro de los ucranianos en ese aspecto. Igual va a ser un partido diferente al de aquí, igual saldrán a atacarnos un poco más al jugar en casa. Pero me preocupan bastante las contras. Es un equipo que sale muy bien. Tiene jugadores de mucha calidad y muy rápidos arriba. Tenemos que contener su ataque. Nosotros también somos un equipo que genera ocasiones y tenemos que estar acertados de cara al gol", deseó el defensa de Banyoles.n

Te puede interesar