Entrenamientos personalizados

nnnEl parón liguero y la ausencia de los nueve internacionales convocados con sus selecciones hacen que los entrenamientos del primer equipo del Celta esta semana sean peculiares. Por el número de integrantes y también por los diferentes ritmos de esfuerzo que marca el cuerpo técnico a los futbolistas en función de su desgaste en lo que llevamos de temporada.
Ayer, Eduardo Berizzo sólo pudo contar con once jugadores de campo y dos porteros para la sesión matinal. De ella se ausentaron, además de los internacionales, los lesionados Marcelo Díaz y Rubén Blanco, así como Claudio Beauvue, que realizó únicamente trabajo en el gimnasio. Porque la semana es pródiga en planes personalizados para los futbolistas.
Por esta razón, la sesión de trabajo fue perdiendo efectivos poco a poco. Los primeros en abandonarla fueron Cabral y Hugo Mallo, que se apartaron para ver las evoluciones de sus compañeros desde la banda. Con Sergio e Iván en portería, trabajaron Sergi, Lemos, Fontás, Planas, Señé, Bongonda, Jozabed, Pape y Rossi. Fueron ejercicios tácticos de ataque y, al finalizar, Berizzo se quedó con tres de ellos –Jozabed, Pape y Lemos– para ensayar desplazamientos en largo. El sevillano lo dejó antes y Pape y Lemos fueron los últimos en acabar. Ritmos distintos.n