Drazic y Señé fueron protagonistas en el duelo con el filial en Balaídos
Hay integrantes de la primera plantilla celeste que, en medio del feliz presente, casi pasan desapercibidos porque apenas han tenido oportunidad de darse a conocer. Es el caso del serbio Dejan Drazic y del catalán Josep Señé, llegados ambos al primer equipo celeste este verano y que ayer centraron las miradas en el partidillo de entrenamiento –dos partes de 35 minutos– entre la primera plantilla y el filial que se celebró en el estadio de Balaídos y que acabó en empate (3-3). Por los mayores marcaron Aspas (m.19), Sergi Gómez (m.32) y Señé (m.65), mientras que por el B lo hicieron Javi Que (m.2) y Berto Castiñeiras (m.60 y 61).
Drazic jugó en la banda izquierda del ataque, su lugar habitual en su anterior equipo (OFK Belgrado), y se le vio cómodo viniéndose hace dentro al jugar a pierna cambiada por su condición de diestro. En un encuenro sin continuidad, tiró buenos desmarques para que le encontrasen sus compañeros, probó fortuna con algún tiro lejano, buscó siempre el uno contra uno y, sobre todo, demostró que es capaz de dar asistencias, ya que suyos fueron los pases de gol de los tantos de Aspas (pase en profundidad hacia el desmarque del ariete dentro del área) y Sergi Gómez (balón colgado para que cabecease el central).
Por su parte, Señé se llevó la mayor parte de las indicaciones de un Berizzo que se movió por todo el campo durante el desarrollo del partido. A "José", como se dirige a él el argentino, le exigió en la presión y en tareas defensivas –sobre todo cuando el filial casi varió todos sus hombres en la segunda parte y el primer plantel sólo hizo un cambio–, fue el sacador de las acciones a balón parado y acabó por marcar el tanto final del empate sin haberse sentido cómodo en la faceta ofensiva.
Los dos confían en poderse mostrar bajo el fuego real de un partido oficial. Mientras, hoy (10:30, A Madroa) afrontarán con el resto del plantel la última sesión de trabajo de la semana.n
