El danés empezó como mediocentro, acabó como falso lateral y regaló el empate a Beauvue
Torrecilla ya se autocensura antes de pronunciar la palabra polivalencia, consciente de que es una virtud que ha destacado en demasiadas ocasiones, pero lo cierto es que la facilidad de algunos jugadores del Celta para ofrecer un gran rendimiento en diferentes posiciones es vital en una plantilla tan corta como la que maneja Eduardo Berizzo. Prueba de ello fue el partido que completó ayer Daniel Wass, destacado como mediocentro o falso lateral.
El internacional danés empezó el partido en la medular y salió bien parado del exigente duelo ante el musculado centro del campo del Sevilla. Bregó como el que más y además asumió protagonismo en ataque, disfrutando de una de las mejores ocasiones del Celta en el primer tiempo.
A la hora de partido, Wass cubrió el hueco del sustituido Jonny en el lateral, aunque ejerció casi de extremo y regaló el empate a Beauvue con una excepcional asistencia. La polivalencia también vale puntos. Mérito de Torrecilla.n