El equipo vigués despide el año en O Vao ante un rival al que nunca ha ganado (16:30)
El Coruxo afronta hoy el último partido de este 2018 en el campo de O Vao, el penúltimo del año, en el que tendrá enfrente al poderoso Real Madrid Castilla, un rival al que nunca ha ganado en competición oficial. De los seis enfrentamientos anteriores entre ambos equipos, el filial blanco ganó cinco y uno acabó en empate, en septiembre de 2011 y en campo vigués.
Con estos precedentes, el conjunto de Jacobo Montes deberá hacer un partido casi perfecto para superar por primera vez al Castilla y para ello, el técnico ha convocado a todos los futbolistas disponibles y anunciará la lista definitiva de dieciocho momentos antes del encuentro. El preparador del Coruxo recupera para esta cita a Mateo y a Néstor, que han superado sus respectivas lesiones, así como a Borja Yebra, que se perdió el anterior partido, ante el Atlético de Madrid B, por sanción. De esta manera, el lesionado Avdic es el único futbolista que causa baja.
El cuadro vigués llega a la cita en un buen momento, tras ceder una sola derrota en las últimas diez jornadas y conseguir un meritorio empate en el campo del Atlético B (1-1) la semana pasada.
Noveno en la clasificación con 22 puntos, el cuadro de O Vao tendrá enfrente a un Castilla que ocupa la tercera plaza con los mismos puntos que el segundo (29), a pesar de que se ha mostrado algo irregular en las últimas semanas, con una derrota ante el Fabril (4-3) y una victoria frente al Sanse (3-2).
El filial madridista, que llega con la única baja de Feuillassier, es el máximo goleador del grupo 1, con 29 tantos, aunque también encaja con facilidad: 20 en total.
"El de mañana (por hoy) es un partido totalmente distinto al del Atlético B, contra un filial que tiene a los mejores jugadores, escogidos a dedo, y que nos va exigir muchísimo, pero creo que estamos preparados y que el plan de partido que hemos desarrollado durante la semana puede salir bien. A ver si somos capaces de llevarlo a cabo", indicó ayer Jacobo Montes, que espera un partido muy complicado: "Es importante que ellos no puedan correr, controlar sus transiciones ofensivas, que son muy verticales y muy buenas, y sobre todo, cuando tengamos el balón, que seamos capaces de encontrar los espacios y los huecos que ellos dejan en defensa. El equipo que más domine el balón y sepa jugar más tiempo en campo contrario va a tener mucho ganado". n
