El equipo vigués logró un empate en el campo del Mérida y se jugará la permanencia el próximo sábado en O Vao
El Coruxo consiguió un empate a dos tantos en Mérida, en el partido de ida de la promoción por la permanencia, y tratará de sellar la salvación el próximo sábado a las siete de la tarde en el campo de O Vao, donde le vale la igualada sin goles, el 1-1 o la victoria para mantener la categoría.
El bautizo en la hoja de registros tuvo acento blanquinegro. Un servicio de Iván Pérez lo pateaba Mario para que todo quedase en agua de borrajas. El cuadro vigués ejercía de oyente, pero en la primera que tuvo escuchó el premio del gol. Una mala cesión hacia su arquero de Javi Chino en la línea divisoria de ambas parcelas se convertía en un balón muerto para Antón de Vicente. El vigués se iba como una exhalación hacia los confines de Felipe Ramos y descerrajaba por bajo al meta romano. 0-1 y golpe de autoridad a las primeras de cambio. El 4-2-3-1 dibujado por el míster visitante daba sus frutos ante un Mérida que tuvo que ponerse el mono de faena para restablecer daños.
Los locales lo tuvieron claro: a recuperar la bola y hacer rápidas transiciones a las bandas. El Coruxo tenía la ventaja en el luminoso pero veía cómo los romanos poco a poco iban ganando enteros en sus acciones balompédicas. Avisaban los emeritenses en un saque de falta botado por Santi Villa, bien repelido por la zaga verde, como antesala del gol de las tablas. Un buen centro de Iván Pérez por el costado derecho aterrizaba en las sienes de Germán, que peinaba sutilmente hacia sus espaldas para el latigazo de Chema Mato con su pierna izquierda. El primer gol de curso del jugador blanquinegro y a remar. Un halo de alegría para un cuadro que volvió a rugir llevado en volandas por un coliseo con casi seis mil gargantas. El once de Montes seguía firme atrás cediendo minutos y bola, pero sin pasar excesivos apuros la verdad.
Era el turno de sacudir el árbol por parte de los vigueses. Desde la frontera del área grande, Mateo armaba su pierna izquierda para desplegar un proyectil desviado de la diana por estrecho margen. Un susto en las entrañas extremeñas.
Después del arranque visceral, ambas formaciones se tomaron un justo y merecido relax muscular y los saludos a los arcos rivales brillaron por su ausencia. Los de Jacobo Montes llegaban al área local en saques de falta sin jugo y en el Mérida seguía sin aparecer la luz en punta que alumbrase ponerse por delante. En resumen: fuerzas parejas y el reloj seguía su curso sin nada digno de reseña hasta que Santi Villa firmó una buena jugada individual bien resuelta por la muralla verde en el 38. Expiraba la primera entrega y otra vez emergía Santi Villa para botar un saque desde la esquina que tapaba con aplomo el arquero Mario. A las duchas y todas las espadas en alto.
El cuadro extremeño saltó con cien cañones por banda dispuesto a comerle hasta las vísceras a los vigueses. Santi Villa sumaba otro saque desde la esquina pero Mario Ramón alejaba fantasmas. Un suspiro después, era Chema Mato el que echó sus boletos pero resolvía firme la zaga verde.
El Mérida seguía creyendo en sus opciones y fruto de su insistencia y corazón obtuvo la remontada momentánea. Un centro sutil de Julio de Dios por la derecha lo remataba tal como le llegaba Iván Aguilar a dos metros de las narices de Alberto.
Pero poco le duró el sabor dulce del gol a los anfitriones, ya que los de Montes reaccionaron con celeridad. Reza el dicho que "camarón que se duerme se lo lleva la corriente" y fue lo que se puso de manifiesto. Se durmió más de la cuenta Iván en la zaga y Diego Silva lograba llevar las tablas definitivas al marcador y sellar un resultado que pone con una pinta estupenda el choque de vuelta en tierras viguesas.
Mérida:
Felipe Ramos; Iván Pérez, Kike Pina, Aguza, Javi Chino, Julio de Dios, Nana, Kiu, Germán (Esparza, min.64), Chema Mato (Javi Gómez, min.74) y Santi Villa.
Coruxo:
Alberto; Rafa Mella (Pitu, min.90), Mario Ramón, Adrián Pazó, Pablo García, Borja Yebra, Antón de Vicente, Fernando Beltrán, Higón, Mateo Miguez (Álex Arias, min.73) y Diego Silva (Pablo Crespo, min.83).
Goles:
0-1, min.3: Antón Vicente; 1-1, min.12: Chema Mato; 2-1, min.54: Iván Aguilar; 2-2, min.57: Silva.
Árbitro:
Rubén Ruipérez Marín y Córdoba Carboneras. Por el Mérida amonestó a Julio de Dios, Chema Mato, Kike Pina y Esparza, y por el Coruxo, a Mateo.
Incidencias:
Partido de ida del 'play-off' por la permanencia en Segunda División B, disputado en el Estadio Romano de Mérida ante unos 5.800 espectadores, algunos de ellos desplazados desde Vigo.
