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Corregir los desajustes

Augusto Fernández, durante un entrenamiento reciente en A Madroa.
photo_camera Augusto Fernández, durante un entrenamiento reciente en A Madroa.

Augusto admite que el equipo ha perdido efectividad en su sistema y debe recuperarla

El capitán reconoce errores como primer paso para solventarlos y dejar atrás esta fase de la temporada en la que el Celta ha encajado tres derrotas en cuatro partidos. Augusto Fernández habla claro: sí hay mala racha, contra lo que piensan otros compañeros, y considera que el germen del mal juego visto el pasado sábado en Riazor comenzó en los partidos anteriores porque el equipo se desajustó en la presión, precisamente un aspecto del juego trabajado en la sesión de entrenamiento de ayer.
El argentino pone el mismo grado de mesura que de realismo: "No dramatizar por demás ni tampoco relativizar en base a que estamos quintos en la clasificación. Tenemos que aceptar que no estamos en la mejor forma". Y una vez aceptado, empezar a poner remedio siendo fieles a la idea de juego defendida hara ahora desde la convicción colectiva: "Somos un equipo que tanto ofensiva como defensivamente dependemos todos de todos. Por la manera que tenemos de jugar. De que la pelota salga limpia desde abajo y a la hora de defender, lo mismo, necesitamos que la presión empiece siendo ajustada arriba, siga en el medio y la pelota llegue lo más sucia posible a nuestro campo. Es un punto que tenemos que encontrar entre todos. Lo vamos a hacer trabajando y sabiendo dónde está el problema".
Augusto se extiende en la explicación al añadir que "es cuestión de ajustar todo. Jugamos de una manera que si llegamos un segundo tarde a una presión se descompensa todo el equipo. Al no recuperar rápido la pelota, a la hora de atacar nos cuesta más. Entre todos trataremos de buscar nuestro mejor punto. Últimamente hemos perdido justeza y es hora de recuperarla", demanda el pivote del conjunto vigués. Porque "si nosotros logramos justeza y equilibrio sin la pelota y explotamos nuestras virtudes ofensivas seremos difíciles al margen del planteamiento del rival. Un equipo que nos juegue ordenado y más directo nos lastima si no lo hacemos. Queremos retomar nuestras buenas sensaciones".

La mala racha
E insiste en evitar cualquier tipo de dramatismo. "En cada temporada, los equipos atraviesan malas rachas y lo que pasa es que uno nunca sabe cuándo va a llegar. Nos está sucediendo ahora y se trata de levantarnos rápido. La vista tiene que estar puesta en el partido del sábado", comenta el capitán.
Porque en el derbi, los deportivistas "fueron superiores y perdimos bien. No llevaron el peso del partido, pero estuvieron finos en los detalles y estos partidos se ganan así".n

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