Color y música hasta la línea de meta

 A ritmo de música techno, los nueve mil participantes en la Holi Run calentaron motores en uno de los aparcamientos de Samil. A medio camino entre una competición deportiva y un festival de música, los dorsales ovacionaban ‘enloquecidos’ por la adrenalina a los ‘speakers’. Sobre el escenario, la promotora, Noemí La Torre y el alcalde Abel Caballero animaron a los asistentes. A la señal, la organización y los miles de participantes esparcieron los polvos que les entregaron con la inscripción. 
Harina teñida de rosa, naranja, amarillo, violeta o azul cubrió la atmósfera, llegando a nublar la visión, por lo que las gafas de sol se hicieron imprescindibles. Se dio la salida y transcurrieron cerca de diez minutos hasta que el último de los inscriptos inició la  marcha, la mayoría andando. El recorrido, de cinco kilómetros, consistía en ir y volver por la Avenida de Samil. En el trazado se colocaron cinco arcos, verde, rosa, azul, naranja y rojo, y a su paso, los dorsales volvían a ser espolvoreados. Familias, muchas pandillas de adolescentes y algún disfrazado disfrutaron del evento que se prolongó hasta primera hora de la tarde, provocando desviaciones de tráfico en las inmediaciones. “Aquí no hay vencedor, el ganador es el que llega más tiznado y  el que lo ha pasado mejor”, apuntó La Torre, de A- 38, empresa madrileña que lleva 25 años, organizado la Holi Run por toda España. En esta ocasión, otras diez localidades disfrutarán de su “carrera divertida”: “Se trata de sumar el deporte y la música en una propuesta que pueda compartir toda la familia”, apuntó la promotora.
Cuatro horas después los participantes aún se veían por Samil con las camisetas tiznadas.n