CELTA

Un Celta poco hecho gana en Ferrol

Los jugadores del Celta posan con el trofeo al final del triangular de ayer en el estadio de A Malata.
photo_camera Los jugadores del Celta posan con el trofeo al final del triangular de ayer en el estadio de A Malata.

Juan Carlos Unzué diseñó dos onces que mostraron sus incipientes ideas de forma deslabazada pero suficiente

El Celta de Juan Carlos Unzué vivió ayer sus primeros duelos, que se saldaron con la consecución del I Trofeo Isidro Silveira tras imponerse en el triangular que lo enfrentó en A Malata con Sporting de Gijón y Racing de Ferrol. Ganó el primer partido medio partido a los gijoneses, 2-0; descansó mientras estos goleaban a los locales 3-0; y le valió un empate final ante los racinguistas (0-0) para hacerse con el título. 


Tienen los partidos de pretemporada una mezcla ponderada de competición y ejercicio de entrenamiento. Ponderada por cada entrenador. Y Juan Carlos Unzué sabe que su labor en estas primeras semanas es la de fijar estilo, para lo que la repetición se convierte en arma fundamental, sacrificando si es necesario cualquier otro concepto.


El técnico celeste fijó dos onces diferentes para cada medio partido del triangular, con equipos iniciales híbridos pero con líneas coherentes con las que ya trabajó en los últimos días. Experimentos controlados en nombres con el fin de constatar quién asimila antes las ideas del nuevo técnico. Importaban más las sensaciones que las realizaciones.


Por partes, en el primer partidillo al equipo vigués se le notó la obsesión por sacar el balón jugado desde atrás –Sergio tenía prohibido cualquier balón en largo–, así como la falta de cotundencia defensiva de un centro del campo formado por el canterano Pape como mediocentro y el jugador del filial Brais y Jozabed como interiores. El Sporting colaboró, probablemente, a los deseos de Unzué planteando una presión en campo contrario que puso a prueba la capacidad céltica para elaborar desde atrás, factor éste que dejó traslucir más de un problema con una pareja de centrales formada por Cabral y Sergi –los dos centrales sobre el papel con menos pie–.


Sin, lógicamente, ritmo en el juego, la circulación celeste sólo adquirió sentido ofensivo cuando apareció por el centro del campo Iago Aspas o cuando Brais se inventó algún pase entre líneas. El moañés generaba por sí solo y por asociación con el mentado Brais o con John Guidetti, que ocupó el centro del ataque tras probar durante la semana también en banda. Él y Maxi Gómez ejercieron de nueves en los dos onces diseñados por Unzué, con Aspas y Beauvue desplazados a la derecha.
Sufriendo en la salida, con Cabral tapando agujeros –Pape todavía no tiene el poso de mediocentro y Sergi era arrastrado por el ataque sportinguista–, con Aspas marcando diferencias puntuales y con Brais dejando detalles. Así se impuso el equipo vigués al Sporting. El marcador lo desniveló con un gol tempranero de Brais tras buena acción de Aspas y Guidetti y con un penalti más que riguroso señalado sobre el sueco tras una bella combinación entre, cómo no, Aspas y Brais, con una gran último pase de éste.

Empate suficiente
La composición del centro del campo y la actitud del rival, en este caso el Racing de Ferrol, dibujaron unos segundos 45 minutos  diferentes para el Celta. Porque el conjunto departamental, en lugar de presionar arriba, esperaba en su mitad del campo. Los de Unzué se mostraron más sólidos, merced a que Radoja, Wass y Lobotka demostraron más capacidad para la presión que sus compañeros que jugaron contra el Sporting. Porque en este encuentro sí se pudo ver a un conjunto vigués más presente en el campo rival sin balón. Eso sí, sin la calidad arriba para desequilibrar, lo que ocasionó que el marcador no se moviese. El único camino, no explorado ante el Sporting, fue el de los cambios de juego buscando a Hjulsager por una banda y por la otra a un Beauvue   que acabó jugando metido al centro como segundo delantero dejando toda la banda a Roncaglia.
En resumen, Juan Carlos Unzué demostró su gusto por la posesión, la esperada defensa en zona y la obsesión de sacar el balón desde atrás. Probó como parejas de centrales a Cabral y Sergi, por un lado, y a Costas y Fontás por otro. Y puso más aparentes titulares ante el Sporting, aunque reservando el centro del campo más hecho para medirse al Racing.

Celta-Sporting de Gijón

Celta:
Sergio Álvarez; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Alende; Pape; Iago Aspas, Brais Méndez, Jozabed Sánchez, Pione Sisto; Guidetti.
Sporting de Gijón:
Diego Mariño; Canella, Pelayo, Juan Rodríguez, Lillo; Pedro Díaz, Sergio Álvarez; Carmona, Moi Gómez, Pablo Pérez; Carlos Castro.
Goles:
1-0, m.7: Brais Méndez; 2-0, m.36: Iago Aspas (p).
Árbitro:
Muñiz Ruiz (colegio pontevedrés). Amonestó a Pelayo.

Racing de Ferrol-Celta

Racing de Ferrol:
Mackay; Pascual, Victor, Martín, Maceira; Pablo, Gonzalo, Brais, Fran Sota; Sergio y Joselu.
Celta:
Iván Villar; Roncaglia, David Costas, Fontás, Pampín; Radoja, Lobotka, Wass; Beauvue, Hjulsager y Maxi Gómez.
Árbitro:
Muñiz Ruiz (colegio pontevedrés). Amonestó a Pascual.

Te puede interesar