El club confía en retener a los jugadores que han despertado el interés de otros clubes este mercado de verano
El mercado de verano se ha convertido en una amenaza para el Celta, por cuyos mejores jugadores se han interesado numerosos clubes de España y el extranjero. Pero nadie tiembla en Praza de España. El club mantiene la calma, se remite a las cláusulas de rescisión de sus mejores futbolistas y confía en retener a todos aquellos que manejan propuestas de otros equipos. Ése es el objetivo de la dirección celeste en los dos meses de mercado que quedan por delante, en los que además debe incorporar a un defensa para cerrar la plantilla y encontrar un destino para David Costas y Levy Madinda, que saldrán cedidos con casi total seguridad.
Prácticamente un tercio de los futbolistas del primer equipo del Celta han sido vinculados con otros clubes en este mercado que todavía no ha empezado a acelerar. Queda mucho tiempo por delante y, por tanto, muchos movimientos por producirse. Pero las últimas semanas han servido para dejar claro que a las principales figuras del Celta no les faltarán novias. Tal es el caso de futbolistas como Manuel Agudo 'Nolito', Augusto Fernández, Santi Mina, Fabián Orellana, Jonny Castro o Andreu Fontás. Por este último sigue interesado el Génova, tal y como se encargó de recordar ayer "La Gazzetta dello Sport". El central catalán gusta al sexto clasificado de la Serie A, que puede hacerse con sus servicios por sólo tres millones de euros y dispone de dinero suficiente para ello tras los traspasos de Perotti al Nápoles, Bertolacci al Milan y el vigués Iago Falque a la Roma, cuyo pase a cambio de una cifra que puede alcanzar los 9 millones de euros se oficializó ayer.
El de Fontás es posiblemente uno de los casos más complicados, puesto que el de Banyoles acaba contrato el 30 de junio de 2016 y las negociaciones para la renovación de su contrato están paralizadas. Por tanto, el riesgo no es sólo que se pueda ir en el periodo estival por apenas tres millones, sino que a partir del próximo mes de enero podría negociar con cualquier otro club y dejar Vigo con la carta de libertad bajo el brazo, tal y como hizo semanas atrás Michel Krohn-Dehli para comprometerse con el Sevilla. En este sentido, los responsables del club vigués trabajarán para retener al futbolistas catalán y ampliar antes de que acabe el año su contrato.
También gusta en Italia Augusto Fernández, en este caso a la Lazio, quien ya tentó al internacional argentino en 2009 –cuando el céltico llegó a firmar un precontrato con la entidad romana– y 2011. El caso del capitán es similar al de Fontás, puesto que puede dejar Vigo por una cantidad muy baja, en su caso 5 millones de euros siempre y cuando tenga el consentimiento de Vélez, que posee el 50% de sus derechos y está interesado en que se produzca un traspaso para cobrar la mitad del mismo y mejorar su delicada situación económica.
Además de la Lazio, también se ha interesado por Augusto el Valencia, aunque su salida hacia la capital del Turia parece poco probable, sobre todo después de la salida del club del presidente ejecutivo, Amadeo Salvo, y los miembros de la dirección deportiva Rufete y Ayala, los principales valedores del fichaje del capitán celeste ante el dueño del club, Peter Lim, que prefería no llevar a cabo una operación que ahora se enfría. El Celta, en cualquier caso, siempre se ha mostrado seguro de la continuidad del subcampeón del mundo en Brasil 2014, que no en vano amplió su contrato hasta el 30 de junio de 2019 antes de irse de vacaciones.
Nolito es, posiblemente, el céltico al que más 'novias' le han surgido en las últimas semanas. Tanto de España, caso del Atlético de Madrid o el Valencia, como del extranjero. Al gaditano le quieren en Portugal, Inglaterra, Italia o Turquía, pero su primera opción es seguir en la Liga española y el Celta trabajará para que continúe defendiendo la zamarra celeste. Por lo pronto, la entidad que preside Carlos Mouriño no está dispuesta a dejarle salir por menos de 18 millones de euros, cifra que figura en su cláusula de rescisión. Hay que recordar que ya el año pasado el Celta rechazó una oferta del Everton por 10 millones, la que era su cláusula antes de renovar y mejorar su contrato en Vigo.
Fontás, Augusto y Nolito gustan en Italia, del mismo modo que Fabián Orellana. La Lazio también tenía al internacional chileno en su agenda, pero en este caso todo parece indicar que el Celta podrá retener al futbolista, con quien ya se ha alcanzado un principio de acuerdo para la renovación de su contrato, que como el de Fontás finaliza en 2016.
Por otro lado, el Sevilla se ha fijado en dos de las perlas de la cantera celeste: Jonny Castro y Santi Mina, a quienes el Celta tratará de retener el mayor tiempo posible. La intención del lateral vigués es seguir en Vigo y de ninguna manera dejará el club si no es después de haber alcanzado un acuerdo con los dirigentes de la entidad, tal y como aseguró su agente, Ginés Carvajal, semanas atrás a este diario. En el caso de Mina, está representado por Jorge Mendes y su abanico de posibilidades es más amplio, pero en principo continuará en el Celta.
Mientras trata de retener a sus figuras, el club vigués trabaja en la incorporación del tercer y último fichaje para la próxima temporada. Llegaron un delantero (Aspas) y un centrocampista (Wass), y falta por llegar un defensa.n
