Pazos de Borbén rindió homenaje a una de sus más ilustres vecinas, María Dolores Solino, que cumplió cien años llena de vitalidad y buen humor
. Lola, como ella prefiere que la llamen, resume su vida en una sola palabra, trabajo, su medio para sacar adelante a su familia. Vecina de la parroquia de Pazos, celebró el siglo rodeada de sus amigos y familiares. “Ojalá todos vosotros los cumpláis también”, comentó. Madre de tres hijos, Lola presume, además de una excelente salud a su edad, de sus 7 nietos y 6 bisnietos. Cuando le preguntan por el secreto de su longevidad, la respuesta es clara, “una taza de vino en las comidas”, a lo que uno de sus hijos añade, “y un plato de chinchos de la ría. Si no son de aquí se da cuenta”. Por lo demás se declara una mujer sencilla, “lo que más le gusta es leer la prensa”, afirma Lucía, su nieta.n
