El chico huyó de los animales en el capó de un coche y evitó que mordieran más a la sexagenaria
Dos perros de razas potencialmente peligrosas atacaron en la parroquia redondelana de Reboreda a una mujer de 62 años que los encontró en la carretera a la altura del Pazo Posadouro y que los acompañaba para llevarlos hasta la casa de sus propietarios. La mujer, de 62 años, fue socorrida por un joven de 32 que escuchó los gritos de socorro y logró atraer la atención de los dos animales, que dejaron tirada a la mujer en el suelo y le persiguieron, mordiéndole en una pierna. La herida fue trasladada al Álvaro Cunqueiro donde se encuentra ingresada con lesiones de consideración en una pierna y un brazo, encontrándose en observación para ver la evolución de sus heridas. Los perros, de raza rottwailer, tiene chip y toda la documentación en orden, estarán bajo vigilancia las próximas 48 horas. El Ayuntamiento puso en conocimiento de los hechos al juzgado.
La mujer, que transita de forma regular por la zona y conocía a los perros, observó que éstos estaban "molestando a los vecinos", por lo que se ofreció a conducir a los animales hasta la casa de sus dueños. Tras acompañarles unos 20 metros, los perros la agredieron, la tiraron al suelo y uno de ellos la mordió de un brazo y el otro en una pierna. La mujer pidió auxilio, y un joven que se encontraba en el Pazo de Posadouro acudió a auxiliarla, golpeando a los perros para intentar que la soltasen. Fue así como los animales se centraron en él y le mordieron hasta que consiguió deshacerse de ellos alejándose y subiéndose al capó de un coche que pasaba en ese momento por el lugar. Hasta la zona se desplazó una ambulancia, que trasladó a la mujer, en estado de shock y sangrando abundantemente por las mordeduras, hasta el hospital Álvaro Cunqueiro. Además, el joven que la ayudó sufrió diversas heridas y le tuvieron que enyesar un brazo, siendo atendido en el centro de salud. Por su parte, efectivos de la Policía Local y Nacional dejaron a los perros bajo la custodia de sus dueños, donde permanecerán en jaulas bajo observación durante las próximas horas a la espera de lo que determine el juez. Según el concejal de Seguridad Ciudadana, Arturo González, los propietarios manifestaron que los perros se soltaron y escaparon hasta la vía pública. Además, señaló que tienen los papeles en regla, la autorización para tener perros considerados como potencialmente peligrosos y tenían el microchip.
