El padre del joven al que podrían pertenecer los restos hallados en Baiona, cree que si se hubieran actuado “estaría vivo”
nnn Rotos por el dolor y la indignación, los familiares de Iván Durán, el joven de 30 años desaparecido en agosto en Baiona y al que podrían pertenecer los restos hallados en el Alto da Peniza en la tarde del sábado, llegaban ayer de madrugada a Galicia desde Huelva. El padre, la madre, y la hermana habían viajado hasta la ciudad andaluza para investigar una posible pista que situaba a Iván en aquella ciudad. Falsa alarma. Una llamada de la Guardia Civil les daba la peor de las noticias.
Un senderista, gracias a su perro, había encontrado un cuerpo en avanzado estado de descomposición en una pista a escasos metros de la vivienda de esta familia. La ropa que llevaba y el tamaño del pie apuntaban a que se trataba de Iván.
“No tuvimos dudas, aunque nos dijeron que estaban a la espera de confirmar el ADN”, se lamentaba ayer el padre, Juan Durán, a su salida del juzgado de guardia en Vigo, junto con su mujer, su hija y amigos de la familia. “A mi hijo le han dejado morir”, afirmó con rabia. Según aseguró “las fuerzas de Seguridad y la Justicia no actuaron a pesar de nuestra insistencia, y si lo hubieran hecho, estoy convencido de que mi hijo estaría vivo ahora”.
Desde el día de la desaparición, el padre recordó cómo ellos han tenido que luchar día a día para que la Guardia Civil y el juzgado atendiera a su llamada de socorro, sin éxito. “Estamos convencidos de que Iván no murió el día en el que desapareció, porque la zona donde fueron hallados los restos, no sólo la habíamos rastreado mil veces, sino que teníamos su acceso vigilado con amigos y vecinos”, explicó.
La familia ha recorrido miles de kilómetros de España y Portugal en busca de cualquier pista sobre Iván, sin rendirse, haciendo búsquedas propias con la ayuda de vecinos y amigos, “a los que estaremos eternamente agradecidos”. Según relató, “el protocolo de búsqueda no funcionó. La Guardia Civil participó al principio , pero desde su coche, como si mi hijo fuera a hacer autostop y me negaron la utilización de perros y otros medios cuando una persona que le conocía le vio, sin saber que estaba desaparecido. Le podíamos haber encontrado”. La negativa de la titular de Instrucción 5 de admitir la solicitud de antecedentes psiquiátricos de Iván, lo que supondría una búsqueda prioritaria, llevó a la familia a recurrir ante la Audiencia. “Su médico nos dijo que podía tener un brote psicótico, pero la vista para la decisión se fijó para el 2 de marzo. Me han matado mi alma”, se derrumbó.n
