La promotora de Nigrán estuvo en situación de preconcurso en 2012
El juzgado mercantil número 3 de Vigo anunció ayer el concurso voluntario de acreedores de la constructora Mario Puentes, una de las tres más importantes de la provincia de Pontevedra. Actualmente la empresa ha finalizado todas sus promociones en construcción.
La firma, originaria de Nigrán y con numerosas urbanizaciones en todo el Val Miñor y el resto de la provincia, mantiene una deuda de 73 millones de euros, mientras que su activo asciende a 23 millones. Sin embargo, no es la primera vez que se encuentra en una situación similar, así, en julio de 2012 entró en preconcurso después de que el juzgado de lo Mercantil número 3 de Vigo ordenara el embargo de sus cuentas. En ese momento la decisión judicial supuso la paralización completa de la actividad, por lo que se vio abocada a suspender pagos de forma provisional. En aquella ocasión logró superarlo al alcalzan acuerdos in extremis con el 100% de sus acreedores para renegociar una deuda que asciendía a 85 millones de euros.
La crisis inmobiliaria golpeó duramente a esta empresa que en su mejor año, 2006, llegó a facturar 22 millones de euros. A partir de aquí, sus resultados fueron mermando hasta llegar a números rojos de 6,1 millones de euros en 2009, ya en plena crisis del ladrillo.
La constructora nació en 1959 en Nigrán de manos de la su fundador Mario Puentes, ya fallecido. La firma se centró en la construcción de residencias en localizaciones privilegiadas, tal y como ellos mismos destacan en su página web. Así, una de las más conocidas es la urbanización de la playa de Patos, cuya plaza recibió precisamente el nombre del fundador. Más de 2.000 familias han confiado en la firma para adquirir sus viviendas, las más recientes en la entrada de Baiona o en Vigo.n
