La intervención de esta persona permitió localizar inmediatamente al autor de los disparos
La colaboración de un joven que se encontraba en la madrugada del pasado sábado en la playa de Arealonga fue vital para la detención de José Luis Luna, acusado de asesinar de un tiro a bocajarro a Daniel Beltrán cuando se encontraba con un grupo de amigos celebrando la noche de San Juan. El joven que ayudó a detener al supuesto asesino le siguió durante un buen trecho cuando el hombre abandonó el arenal corriendo después de haber disparado a Dani y a otro amigo de la víctima, a la que no logró alcanzar.
Este chico al ver alejarse a José Luis Luna comenzó a seguirle en dirección a la avenida de Vigo mientras llamaba a la Policía y les explicaba hacia dónde se dirigían. Esta información fue de vital importancia para la Policía Nacional, que enviaba varias patrullas al lugar donde se había producido el tiroteo. Uno de los vehículos policiales, que se encontraba muy cerca de la playa de Arealonga al estar en un operativo de seguridad ciudadana en el barrio de Teis fue el primer en llegar al lugar y localizar al presunto asesino cuando pretendía subirse a un taxi para huir de la zona.
Esta decisión de no abandonar la persecución impidió que se perdiera el rastro de Luna, que fue localizado poco después por los agentes que llegaron en la primera patrulla que se desplazó hasta Chapela.
En el momento de la detención, Luna no dudó en echar mano nuevamente del revólver Magnum que escondía en la riñonera. Pese a que apuntó a los agentes, la rápida intervención de éstos evitó lo peor. Algo que sin embargo no habría sido posible sin la intervención del joven que se arriesgo y siguió al asesino que unos segundos antes había disparado a sangre fría y sin pensarlo dos veces sobre Danie, al que dejó tendido en el suelo agonizando.
El detenido está considerado por la Policía como un hombre violento que además cuenta con un largo historial delictivo y que había salido de prisión recientemente tras cumplir una condena por tráfico de drogas.
