La administración de lotería que vendió el año pasado cuatro series del Gordo de Navidad ha despachado un 50% más de décimos para el sorteo de mañana lunes
nnn En la administración número 1 de O Rosal aún no han olvidado la emoción vivida hace un año, cuando los niños de San Ildefonso cantaron el primer premio de la Lotería de Navidad. Un número, el 62.246, que aún está en la entrada "para animar a la gente y recordarles que fue aquí que se vendió una de las series del gordo", comenta Santiago Villa, propietario del despacho rosalense. Todavía faltan algo menos de 48 horas para que los bombos comiencen a girar y el movimiento de clientes es incesantes. Las ventas comenzaron ya en el verano, momento en el que "muchos emigrantes que estaban aquí pasando sus vacaciones aprovecharon y compraron ya sus décimos".
El hecho de haber vendido aquí el Gordo de Navidad ha supuesto para este despacho "un aumento de cerca del 50% de las ventas", explica Santiago mientras su hijo no deja de vender décimos. Una de las clientes, Marta Goyás, le pregunta por un número terminado en 13. Es un encargo de un grupo de amigos de A Guarda, desde donde se ha trasladado hasta O Rosal "porque querían que fuese comprado aquí el décimo".
La mayoría de las personas que se acercan hasta la céntrica calle de Ramón Franco, a escasos metros de la plaza del Calvario, "son vecinos del municipio o de la comarca, aunque también hemos detectado un aumento de caras desconocidas, de gente que viene de otros sitios".
Para poder hacer frente a la fuerte demanda de lotería, Santiago ha tenido que hacer un segundo pedido en el mes de julio. Por el momento aún tiene décimos para el sorteo del lunes y, para facilitar que los que quieren probar suerte lo puedan hacer sin problemas, abrirá hoy todo el día. Una jornada intensiva que le compensa porque repartir suerte es algo que le hace sentirse feliz.
Santiago lleva cinco años al frente de este despacho y el premio de las Navidades pasadas fue su primer gordo como lotero, aunque hay que resaltar que hace tres años cayó aquí el euromillones con 580.000 euros que hicieron millonario a un vecino de la comarca. La buena suerte no es patrimonio sin embargo de Santiago. Su madre también parecía estar abonada a la buena suerte, ya que de los 25 años de historia de este despacho, veinte ella estuvo al frente y logró otros cuatro gordos. Todo un récord que hace pensar que la diosa Fortuna está tiene ciertas querencias por este local. Algo que parece que saben muy bien los numerosos clientes que esperan pacientes a ser atendidos. Eso sí, no todos quieren lotería de Navidad, algunos buscan un pellizco en alguno de los sorteos que se celebran de forma periódica y que ya han dejado más de una alegría entre los vecinos de O Rosal.
