SEIS MESES DE LA EXPLOSIÓN

El desescombro podría retrasar a 2020 la reconstrucción de Paramos

Los vecinos continúan visitando las ruinas de la Zona 0 que ahora se encuentran completamente valladas para evitar el pillaje.
photo_camera Los vecinos continúan visitando las ruinas de la Zona 0 que ahora se encuentran completamente valladas para evitar el pillaje.

La falta de solución para el desescombro de la zona cero desespera a los afectados por la explosión de la pirotecnia. "Pasaremos las Navidades fuera de nuestras casas", dicen los vecinos sin fecha para regresar a sus hogares y que quieren retomar sus vidas.

 "No han cumplido con lo que dijeron y seis meses después de la explosión siguen sin desescombrar la Zona 0", comenta indignado el presidente de la Asociación de Afectados de Paramos-Guillarei horas después de bajar del avión que le traía de vuelta de una reunión con el secretario de Estado  de Política Territorial. Una entrevista en la que le informaron que "este Ministerio sólo se hará cargo de la mitad del coste de retirar el amianto y que del desescombro deberá hacerlo Interior, aunque la ejecución correrá a cargo del Ayuntamiento". Por su parte, desde el Concello ya han enviado una carta al Ministerio solicitando que se haga cargo de esta actuación, imprescindible para iniciar la reconstrucción. Ayer los vecinos se manifestaron una vez más ante la Subdelegación del Gobierno para exigir un "desescombro inmediato" y realizado por una "empresa pública", lo que reduciría a tres meses el plazo, ya que en el caso de que sea una obra municipal los vecinos sólo podrán comenzar a reconstruir sus hogares a finales de 2019 o principios de 2020. "¿De verdad agilizaron las ayudas de zona cero para que ahora no podamos hacer nada con ellas?, cuestionaron. Además, han reclamado al Gobierno central que, en el marco de la declaración de zona gravemente afectada por una emergencia de protección civil, articule los mecanismos para habilitar más fondos para las segundas viviendas de zona cero y para los vehículos dañados. Y es que, conforme señalan los vecinos, las ayudas recibidas en estos casos no son suficientes para reconstruir un hogar ni para reponer los coches, que son el "único medio de transporte" en esta zona rural. 

El anuncio por parte de Política Territorial de que no se hará cargo de la ejecución del desescombro, hace que sea el Ayuntamiento de Tui el que licite "lo que supondrá que estamos hablando de por lo menos dos años cuando de la otra forma se podría acabar en seis meses a lo sumo", comenta Salvador García  visiblemente decepcionado con el rumbo que han tomado los acontecimientos. Otro de los escollos con los que se han encontrado es que el proyecto presentado el pasado mes de septiembre por el alcalde deberá ser modificado. "Parece que incluye partidas como la de consolidación de muros, que  corren peligro de caer, y que según nos informaron en Política Territorial no quieren asumir", explica. 

El cansancio en los vecinos de Paramos es notorio después de seis meses de lucha para lograr que las diferentes administraciones colaborasen en la recuperación de la zona destruida de la nave clandestina. Pese a que sienten que "se están pasando el problema unos a otros y parecen dispuestos a cargar el peso de todo sobre la administración más débil, como es el Ayuntamiento, no vamos a tirar la toalla y si hace falta tomaremos posturas más duras que las que tuvimos hasta ahora", comenta el presidente de la plataforma, al que apoyan los restantes afectados que ayer se concentraban ante la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra para exigir, un vez más, el desescombro de la Zona 0, en la que apenas han cambiado las cosas desde el fatídico 23 de mayo en el que se produjo la explosión que ocasionó dos muertos y una treintena de heridos de diferente consideración, aunque ninguno de gravedad. 
Las complicaciones también afectan al suministro de luz en la zona. La compañía eléctrica "no quiere  hacer un doble desembolso y poner luz ya que cuando se haga la reconstrucción está previsto que todo el cableado sea subterráneo,  y ahora tendrían que ponerlo aéreo", explica Salvador, que comenta con la calma que le caracteriza  que "al final somos los vecinos los que estamos moviendo todo con mucho esfuerzo", y señala al contenedor que instaló el Ayuntamiento y al que "están llevando los escombros aquellos que han comenzado a reconstruir sus casas". 
En la larga lista de asuntos por resolver que acumula Paramos, también se incluye "el desarrollo en un decreto de la declaración de zona catastrófica que aprobó el gobierno. Por lo que nos dicen , cada ministerio está todavía preparando la parte que le corresponde. Pero mientras los afectados siguen sin soluciones seis meses después de la explosión". A todo ello se suma que el abogado y asesor fiscal contratados por el Ayuntamiento para apoyar a los vecinos en las gestiones para pedir las ayudas "se les terminó el contrato sin que se hayan solucionado todos los casos". 

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