La nueva infraestructura de la red sanitaria superará en un 160% al actual edificio
Los trabajos en la construcción del centro de salud de Gondomar avanzan según lo previsto y por ello el conselleiro de Sanidade de la Xunta, Jesús Vázquez Almuíña, acudió en la mañana de ayer a la parcela ubicada en rúa das Ánimas para comprobar in situ el estado en el que se encuentran. Tal y como adelantó a este diario en el mes de mayo el alcalde gondomareño, Francisco Ferreira, la villa condal contará hacia mayo de 2019 con un nuevo centro de atención primaria, que reforzará a los cuatro existentes en la comarca superando en casi mil metros cuadrados la superficie del actual edificio sanitario ubicado en pleno centro urbano de la villa. “El inmueble superará en casi un 160% al tamaño del actual”, explicó Almuíña.
El Conselleiro destacó en este sentido que los existentes en el Val Miñor tienen muy pocos años de antigüedad, lo que les permite dar una cobertura de atención primaria “de muy buena calidad”, aunque el de la condal por ser el más reciente de los cuatro estará dotado de más avances. “Tendrá todas las consultas de médicos de familia, de matrona, de pediatría, trabajadora social, zona de biblioteca y despachos. La verdad que es un centro muy completo”, añadió.
Por otra parte y después de las modificaciones sufridas en el proyecto inicial, el edificio, dada su amplitud, tiene la ventaja de que podrá adaptarse a las necesidades de los vecinos del municipio una vez entre en funcionamiento, e incluso no descarta una futura ampliación si fuese necesario. “La parcela en la que se ubica tiene 5.000 metros cuadrados de extensión con lo que podríamos dotarlo de un añadido si las circunstancias así lo requiriesen”, mantuvo. Se trata de un nuevo planteamiento que consiste en “acercar cada vez más los servicios al ciudadano y el centro de salud es el sitio adecuado”. Por ello desde la Administración aseguraron que seguirán estudiando las tendencias y necesidades no solo en la villa condal sino en el resto de núcleos del área de Vigo”.
La ejecución del centro de salud fue objeto de múltiples paralizaciones desde que se plantearon por primera vez en el año 2009. Ya en 2015 y con los trabajos de cimentación iniciados, al adjudicataria Corsan Corviam entró en concurso de acreedores, lo que retrasó su construcción en algo más de dos años y un engorde del presupuesto inicial de medio millón de euros. Tres años más tarde, en enero de 2018, sufrió un nuevo retraso a la espera de un estudio de inundabilidad del terreno realizado por Augas de Galicia. Tras recibir el visto bueno del organismo autonómico, su construcción se retomó con varios cambios que en palabras del Conselleiro “mejorarán sin duda el resultado final, y éste será de los más modernos de estas características en toda Galicia”.
